La bronquitis es una enfermedad que puede nacer a causa de diferentes factores infecciosos, los cuales afectan a los bronquios situados en las cercanías de nuestros pulmones, causando la inflamación de los mismos. Por su parte, esta enfermedad puede presentarse en grados de menor o mayor relevancia, hecho que estará relacionado directamente a la duración de la misma, así como también a su cura.
Los síntomas propios de un cuadro de bronquitis se encuentran relacionados a la abundancia de tos en la persona, así como también la aparición de mucosidad de una tonalidad amarillenta. A su vez, estos síntomas pueden verse acompañados de un cierto grado de fiebre y malestar corporal general en el paciente.
En cuanto a otros síntomas propios de la bronquitis, podemos mencionar la aparición de fatigas corporales en la persona, causados muchas veces por obstrucciones en las vías respiratorias, inflamación de bronquios e incluso obstrucción de alveolos.
Por otra parte se debe hacer mención a los diferentes grados o niveles con los cuales esta enfermedad puede hacerse presente en una persona. La bronquitis puede distinguirse en dos principales categorías, la bronquitis aguda y la bronquitis crónica. Esta última sin dudas presenta un mayor grado de peligrosidad, apareciendo muchas veces en aquellas personas propensas a sufrir de enfermedades respiratorias periódicas.
Al momento de curar la Bronquitis, deberemos dilucidar como primera medida las posibles causas de la Bronquitis, tratándose generalmente de infecciones de tipo bacteriana. Para esto tendremos que recurrir a la toma de antibióticos como la amoxicilina. Por otra parte, y en caso de tratarse de una bronquitis causada por un factor ajeno a un virus, la persona simplemente deberá intentar hidratarse y alimentarse de forma correcta, alejándose también de ciertos vicios como el cigarrillo al menos por unos días.
Los métodos de prevenir la Bronquitis son simples y no requieren de mucho esfuerzo por parte de la persona. Simplemente deberemos mantener un control ante los alimentos ingeridos durante el día, como así también una hidratación adecuada. Esto también puede verse acompañado de la realización de ejercicio físico y el alejamiento de sustancias nocivas como el humo de cigarrillo.
Otro consejo de gran importancia ante la posible aparición de un cuadro de bronquitis, es el de intentar evitar cambios bruscos de temperatura. Abrigarnos bien a la hora de salir en caso de ser una época invernal protegiendo con sumo cuidado la zona de nuestro cuello.